domingo, 5 de abril de 2020

LA COMEDIA DE LOS ASTROS



        ¿Cuándo darás consuelo a mi desconsuelo? Mientras clamo por una señal al final de esto, mientras voy enloqueciendo con recuerdos de un pasado muy, muy lejano que va desvaneciéndose lentamente en el horizonte, mientras al alzar la mirada a las estrellas, ellas también miran hacia donde estoy y ríen.
  
       ¡Eh miren, allí camaradas celestiales, allí hay uno más! Miren, uno más que alza la mirada hacia  nosotros en clamor por su fútil penuria, uno más que sufre por amor.

        ¿Cuándo aprenderán que el secreto de su felicidad es que a quien deben aprender a amar es a si mismos antes de amar a alguien más?

      ¿Cuántas veces hemos visto lo mismo por eones a incontables almas recorriendo el mismo camino que yace ahora embadurnado por los ríos de sangre y tinta, de tantos corazones rotos que algunos ingenuos y otros tantos crédulos se atrevieron a caminar a ciegas?

Si ellos supieran lo que hemos visto por siglos, a muchos seguir el mismo lamentable patrón, comprenderían el por qué nuestra comedia favorita es la tragedia humana.

viernes, 3 de abril de 2020

DIFERENTE


    
      ¿Por qué no puedo hacer que vuelvas a ser quien eras antes?, la persona cariñosa que me contestaba con una voz cálida al otro lado del teléfono, y que ahora me responde con un tono de altivez y con el sentimiento de triunfo al ver que sumiso le llama quien está a sus pies, quien desea al menos una dosis diaria del sonido de tu voz, para sobrellevar un día sin ti, sin caer en la desesperación de tu angustiante ausencia?. Mírame, al borde del suplicio, te has convertido en mi más terrible adicción.

jueves, 2 de abril de 2020

FALSA TRANQUILIDAD


     Yo creía que fumando un cigarrillo me iba a sentir mejor y un poco menos tenso, pero fue una mala idea, el resultado fue muy adverso: mi ansiedad, depresión y angustia aumentó, mientras al mirar por la ventana observé paz y escuché silencio sobre aquella avenida que ruidosa servía como cauce a un imparable caudal de vehículos de metal; pero esa paz y silencio no será de tranquilidad, era el sonido del miedo por lo que nos acecha, es la tranquilidad con la que una presa aguarda en silencio a que el depredador pase de largo y no lo encuentre y acabe con él. La humanidad yace guarnecida por temor a un enemigo que no ve, la paz de las calles no de tranquilidad, es por miedo a la muerte.